EMPRESAS DE PAZ

El negrito del swing. El negrito del sabor. El negrito de la alegría. Quien trae luz donde hay oscuridad, a quien no le gusta que lo llamen como víctima, porque eso le parece que genera “pesar”. Le gusta que le llamen como el sobreviviente de la masacre de Bojayá, Chocó uno de los hechos más trágicos de la historia Nacional.

 

Vive en Bogotá desde hace 11 años, es una de las 8 millones de víctimas que ha dejado el conflicto armado a través de los casi 60 años de  guerra entre el gobierno y los grupos subversivos al margen de la ley. Cantar, componer es su respuesta ante la adversidad y la tristeza que puede dejar perder su banda y ver en ruinas su pueblo Bojayá.

 

Tiene tres trabajos, pero además de esos trabajos, él trabaja para llevar su mensaje de paz a través del arte. Está esperando su primer hijo. El gesto de perdón y reconciliación que ha marcado su vida lo vivió con su padre, quien lo abandonó desde el día que se enteró que su mamá estaba embarazada. Ella fue madre y padre al mismo tiempo, era pescadera, toda su familia lo era.

 

Conoció a su papá cuando tenía 5 años, y aún así después de eso él nunca quiso responder por él. Ahora su papá le pidió perdón por haberlo abandonado, “yo lo perdoné, porque ya no le guardo rencor. Cuando lo perdoné me quité ese peso de encima, porque quien se hace daño es la persona que siente el rencor no a la persona que le tienen rencor”, Noel invita a reflexionar. Por su parte dice que sólo le ha pedido perdón a Dios por todas las cosas que ha hecho “mal” ante los ojos de él.

 

Ese 2 de Mayo del 2002 ya ha quedado atrás, y eso lo refleja en su música, en la que Noel busca trasmitir una pequeña forma de denuncia pero hecha también para que la gente la disfrute. Se niega a que la melancolía y la resignación lo derroten, pues los sonidos de la masacre que vivenció son todo lo contrario a la música que él hace.

 

Los famosos trajes de Noel simbolizan los peces con los que se crió,  pues creció viendo a su mamá pescar.  Uno de ellos elaborados con monedas de 50 pesos colombianos, otro con las tapas de gaseosa o cerveza y otro con los famosos ganchos de nodriza. Cada uno de ellos significa un pez diferente. La cuenta en dinero del traje de monedas de 50 pesos, es de 150.000 , fuera de la mano de obra y las brocas que compraba para poder perforarlas.

 

El proyecto de vida de Noel es seguir trabajando por la paz del país a través del arte, seguir construyendo, volviendo a reír, seguir riendo a través de Noel Palacios, El Negrito del Swing, su segundo yo, una persona alegre, extrovertida, que se toma la tarima con su show, uno muy particular, en el que suenan su tropifolclor con sabor a yenyeré, los sonidos propios del Pacífico, los sonidos propios de la paz.