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Fueron muy díficiles los primeros días de trabajo porque nunca antes lo había hecho.

De los campos de guerra al parque Panaca

WILSON

Llegamos el domingo en horas de la mañana al Parque Nacional de la Cultura Agropecuaria, Panaca, donde nos dirigimos a la estación de ganadería para hablar con Juan Carlos* uno de los desmovilizados que trabaja dentro del parque, quien por motivos de su timidéz no quiso hablar acerca de su reintegro a la vida civil, pero nos envío a la Estación Equina donde se encuentran dos de sus compañeros que hicieron parte del mismo proceso, Yerson* y Wilson*, el primero también se  reservó la historia, pero Wilson de manera informal nos habló un poco de su experiencia dentro y fuera del grupo armado.

 

Inicia contando que lleva dos años trabajando en el parque, donde considera que desde que llegó lo han tratado muy bien, su día laborar inicia a las 8:00 a.m. y termina a las 7:30 p.m. pues hace parte del Show del Mundo del Caballo y Travesía Panaca, que consiste en una representación artística en diferentes modalidades de equinos, actividad con la que finaliza el recorrido de los turistas.

 

Se desmovilizó en el 2014 y lo hizo por voluntad propia, pues consideraba que estaba aburrido de la rutina y quería tener nuevas experiencias en la vida, ya que pertenecía a las Farc desde los 13 años y no sabía lo qué era vivir en la vida civil. Dentro de la guerrilla tuvo una pareja sentimental con la que tiene una hija de 8 años, que actualmente vive en Brasil, y cuando tomó la decisión de desmovilizarse, esta mujer lo dejó porque ya no manejaba la misma cantidad de dinero.

 

Meditaba sobre su desmovilización y lo mala que posiblemente iba a ser, pues él creía que recibiría el rechazo de su familia por haber pertenecido durante 13 años a las Farc, lugar en el que reafirmó su ideología revolucionaria y donde alcanzó el rango de comandante de una columna móvil. Sin embargo, y para su asombro, el reencuentro con su mamá y hermanos fue exitoso, pues recibió el perdón por parte de ellos a pesar de  haberlos abandonado durante tanto tiempo, ya que era el menor de la familia, el que siempre le llevaba la contraria a los demás.

 

Actualmente su cotidianidad ha cambiado de manera drástica, pues su trabajo en Panaca no es tan fuerte y tiene una vida más tranquila a la que llevaba dentro de la guerrilla. En el 2015 terminó de filmar una película en Bogotá y Medellín, y como planes a futuro, para el 2017, desea salir del país. .

 

*(Nombres sin apellidos para proteger la seguridad de la fuente) 

Mi hija merece saber mi pasado - Wilson
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